Desmenuzar en un informe los diferentes aspectos relacionados con unas competiciones como son las LEBs se convierte en un interesante –incluso apasionante- ejercicio de análisis. El paso del tiempo junto a las experiencias expresadas por aquellos que han – hemos – vivido en primera persona la realidad de la competición permite tener una visión mucho más completa del “Fenómeno LEB”. La perspectiva del tiempo siempre se convierte en el elemento fundamental para sacar conclusiones.
En los últimos años he tenido el privilegio de compartir las diferentes sensaciones LEBs con numerosos jugadores, entrenadores, directivos, periodistas. He participado en debates, reflexiones o estudios sobre este fenómeno creciente que son las competiciones LEB. Más allá de cuestiones puntuales que la perspectiva del tiempo acaba por convertirlas en anécdotas poco significativas, la sensación general es que, efectivamente, el escenario Adecco LEB ha sido y sigue siendo, un espacio fundamental para el desarrollo deportivo de cientos de jugadores y entrenadores (con sus respectivos ayudantes, PFs, Fisios, Delegados). Para el desarrollo profesional de periodistas, para el crecimiento de las áreas deportivas y organizativas de muchos clubes, para el disfrute de miles de aficionados repartidos por toda la geografía que en algún momento han tenido la ilusión de disfrutar de baloncesto de buen nivel. Han sido noventa localidades repartidas en 18 comunidades autónomas las que durante estos últimos trece años han vivido en primera persona las competiciones LEB.
Y llego a conclusiones positivas, además de por los datos meramente objetivos, a través de los testimonios de los propios interesados. De los protagonistas de nuestro baloncesto como son los jugadores y entrenadores, además de esos directivos impulsores del baloncesto. Los deportistas que pasaron por la LEB y ahora están en lo más alto valoran esa experiencia como fundamental para su progresión. Los que ingresaron en ella y de ella no salieron lo valoran como un espacio clave para desarrollarse profesionalmente. En los medios de comunicación locales, elementos claves en la difusión de las competiciones, la Adecco LEB se ha convertido en un contenido especialmente atractivo. Todo puede ser susceptible de mejora y por supuesto las LEBs no escapan de esa crítica pero con el paso de los años y tras pulsar opiniones y extraer mis propias conclusiones detecto muchos más elementos positivos que negativos.
Esta semana se celebra en Madrid el “Congreso Adecco LEB” con ponentes de lujo. Se hablará de las competiciones nacionales, internacionales, del presente y futuro de nuestro baloncesto. Se hablará de la Adecco LEB, esa competición que con defectos y virtudes, como todas y cada una de las competiciones, se ha convertido en un Fenómeno reconocido en todo el continente baloncestístico. Mis más sinceras felicitaciones a los artífices que, hace más de trece años, hicieron posible el nacimiento de la primera LEB.
En los últimos años he tenido el privilegio de compartir las diferentes sensaciones LEBs con numerosos jugadores, entrenadores, directivos, periodistas. He participado en debates, reflexiones o estudios sobre este fenómeno creciente que son las competiciones LEB. Más allá de cuestiones puntuales que la perspectiva del tiempo acaba por convertirlas en anécdotas poco significativas, la sensación general es que, efectivamente, el escenario Adecco LEB ha sido y sigue siendo, un espacio fundamental para el desarrollo deportivo de cientos de jugadores y entrenadores (con sus respectivos ayudantes, PFs, Fisios, Delegados). Para el desarrollo profesional de periodistas, para el crecimiento de las áreas deportivas y organizativas de muchos clubes, para el disfrute de miles de aficionados repartidos por toda la geografía que en algún momento han tenido la ilusión de disfrutar de baloncesto de buen nivel. Han sido noventa localidades repartidas en 18 comunidades autónomas las que durante estos últimos trece años han vivido en primera persona las competiciones LEB.
Y llego a conclusiones positivas, además de por los datos meramente objetivos, a través de los testimonios de los propios interesados. De los protagonistas de nuestro baloncesto como son los jugadores y entrenadores, además de esos directivos impulsores del baloncesto. Los deportistas que pasaron por la LEB y ahora están en lo más alto valoran esa experiencia como fundamental para su progresión. Los que ingresaron en ella y de ella no salieron lo valoran como un espacio clave para desarrollarse profesionalmente. En los medios de comunicación locales, elementos claves en la difusión de las competiciones, la Adecco LEB se ha convertido en un contenido especialmente atractivo. Todo puede ser susceptible de mejora y por supuesto las LEBs no escapan de esa crítica pero con el paso de los años y tras pulsar opiniones y extraer mis propias conclusiones detecto muchos más elementos positivos que negativos.
Esta semana se celebra en Madrid el “Congreso Adecco LEB” con ponentes de lujo. Se hablará de las competiciones nacionales, internacionales, del presente y futuro de nuestro baloncesto. Se hablará de la Adecco LEB, esa competición que con defectos y virtudes, como todas y cada una de las competiciones, se ha convertido en un Fenómeno reconocido en todo el continente baloncestístico. Mis más sinceras felicitaciones a los artífices que, hace más de trece años, hicieron posible el nacimiento de la primera LEB.
No hay comentarios:
Publicar un comentario