Por muchas vueltas que le demos al final siempre acaban imponiéndose los mejores jugadores. Las selecciones españolas de baloncesto y también de fútbol han alcanzado la cima mundial, el reconocimiento unánime, de la mano de una serie de jugadores talentosos que, con la dirección adecuada, se han convertido en referentes internacionales. Curiosa circunstancia de que en ambos deportes esas selecciones se han proclamado campeonas con diferentes seleccionadores – todos ellos de alto nivel obviamente –.
Pero más allá de ese hecho objetivo existe un denominador común en el que debemos incidir. Las características de esos jugadores son, en todos los casos, la de buenos deportistas – chicos educados -, y en muchos, la de jugadores con capacidad para entender el juego. Con talento para finalizar pero además con calidad para “leer”, para interpretar las ventajas, las pausas. Hablo con muchos entrenadores de ligas profesionales y su principal preocupación con respecto a los jugadores que llegan desde la formación es la falta de “conocimiento del juego”.
Detectado uno de los posibles aspectos susceptibles de mejora en la formación creo que vale la pena incidir ahí además del buen trabajo técnico y físico que es obvio se hace desde los clubes y las federaciones. Para conseguir una mejor "lectura del baloncesto" y sobretodo un refuerzo en aspectos que luego resultarán fundamentales para dar el adecuado salto de junior a senior vale la pena que los entrenadores sean “integrales”. Es decir, que los entrenadores de formación se interesen - de manera real asistiendo a entrenamientos y hablando con entrenadores seniors -por lo que sucede en el baloncesto adulto y por lo que sus jugadores deben conocer de ese baloncesto. Y, por supuesto, que los entrenadores de seniors se impliquen en la formación de los chicos jóvenes de manera real -viendo cómo entrenan y cómo juegan-.
Pero más allá de ese hecho objetivo existe un denominador común en el que debemos incidir. Las características de esos jugadores son, en todos los casos, la de buenos deportistas – chicos educados -, y en muchos, la de jugadores con capacidad para entender el juego. Con talento para finalizar pero además con calidad para “leer”, para interpretar las ventajas, las pausas. Hablo con muchos entrenadores de ligas profesionales y su principal preocupación con respecto a los jugadores que llegan desde la formación es la falta de “conocimiento del juego”.
Detectado uno de los posibles aspectos susceptibles de mejora en la formación creo que vale la pena incidir ahí además del buen trabajo técnico y físico que es obvio se hace desde los clubes y las federaciones. Para conseguir una mejor "lectura del baloncesto" y sobretodo un refuerzo en aspectos que luego resultarán fundamentales para dar el adecuado salto de junior a senior vale la pena que los entrenadores sean “integrales”. Es decir, que los entrenadores de formación se interesen - de manera real asistiendo a entrenamientos y hablando con entrenadores seniors -por lo que sucede en el baloncesto adulto y por lo que sus jugadores deben conocer de ese baloncesto. Y, por supuesto, que los entrenadores de seniors se impliquen en la formación de los chicos jóvenes de manera real -viendo cómo entrenan y cómo juegan-.
1 comentario:
Si los entrenadores de categoria senior fueran más valientes a la hora d eapostar por los jugadores jovenes en lugar de fichar medianias a las que han visto por video y con la posibilidad de cortarlos tantas veces como quieran durante la temporada se darian cuenta que quizásestos jugadores jovenes vienen mejor trabajados y formados de lo que te dicen.Son ellos los que han de dar minutos y confianza para que estos desarrollen las cualidades adquiridas y no tirar un dinero que muchas veces ni existe.
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